Oración Para Mi Hijo: Rebelde, Para Que Sea Obediente y Más

Padre Celestial, te doy infinitas gracias por haberme dado el mejor regalo de mi vida, porque mi hijo significa todo para mí y cuando le sucede algo malo, mi corazón se rompe en mil pedazos.

En esta ocasión quiero implorar que te apiades de mi pequeño y lo llenes de fortaleza para que supere las dificultades que lo afligen.

El mal ha tomado posesión de su cuerpo y no permite que alcance la tranquilidad. Sálvalo y no lo desampares.

Señor, ten misericordia de él y haz que supere la debilidad que lo somete. Bendícelo para que todo el mal abandone su cuerpo y vuelva a ser un joven alegre. Amén.

Dios, hoy te suplico que tengas compasión de mí, ya que tú, que todo lo ves y todo lo sabes, comprendes que mi hijo se encuentra poseído por la rebeldía.

Haz que reflexione sobre sus actos para que entienda que no debe ser un joven rebelde. Dale una luz de esperanza para que los malos pensamientos se alejen y sea un hijo obediente.

Ayúdalo a vencer todo lo que domina su mente e impide que alcance la serenidad y el sosiego.

Padre, apiádate de mí y no me abandones. Permite que mi hijo sea un pequeño obediente y no se deje llevar de la rebeldía u otra mala conducta. Amén.

Señor, hoy estoy ante ti para solicitar que bendigas a mi hijo en el estudio. No permitas que nada ni nadie lo desvíe del buen camino.

Ilumina su mente y llénalo de sabiduría y entendimiento para que no se dé por vencido en los momentos de dificultad. Conviértete en su fiel escudero y no dejes que el mal lo atormente.

Acompáñalo cada día para que las malas amistades o las tentaciones no lo alejen de tu Reino. Protégelo de la pereza, la irresponsabilidad y la rebeldía.

Apiádate de él y guíalo por el sendero de la bienaventuranza para que en su vida solo haya gozo y júbilo. Amén.

Padre Supremo, tú que posees la facultad de controlar todo lo existente, permite que (nombre del hijo) regrese a casa de nuevo.

Sabes que se encuentra lejos desde hace un tiempo, por lo que mi mayor deseo es que llegue a casa en este momento.

Ilumina su mente para que comprenda que debe regresar. No dejes que el orgullo siga controlando su corazón, porque los sentimientos positivos siempre triunfan por encima del mal.

Santo Señor, derrama tu misericordia sobre mi hijo y haz que vuelva a casa. Escúchame y no me desampares, por favor. Amén.

Querido hijo, en este día quiero que Dios te bendiga para que te vaya bien en el estudio. Que todas las malas energías se aparten de tu lado y encuentres la tranquilidad.

Hoy comienzas un largo camino, en el cual vas a tener muchas alegrías, pero también un gran número de dificultades. Afortunadamente, Dios te guiará para que salgas victorioso.

Amado hijo, recuerda que en este día empiezas una nueva aventura. Por eso, le ruego al Señor que no permita que nada ni nadie te arrebate la felicidad.

Santo Padre, en tus manos deposito lo más preciado de mi vida. Guíalo para que encuentre la prosperidad en el estudio. Amén.

Padre Supremo, en este día especial quiero pedirte que bendigas a (nombre del hijo). Haz que las buenas sensaciones siempre lo acompañen para que logre cumplir todos sus propósitos.

Llénalo de fortaleza para que no caiga en las dulces tentaciones. Regálale la sabiduría suficiente para que en las épocas de penurias encuentre una salida a todos sus problemas.

Guíalo por el camino de la prosperidad y defiéndelo de cualquier mal que pretenda llevarlo hacia la desdicha y el sufrimiento.

Señor, te suplico que lo llenes de bendiciones hoy y siempre para que goce de una vida tranquila y cumpla muchos años más bajo tu gracia. Amén.

Sagrado Jesús, te quiero implorar que ayudes a mi hijo, quien se encuentra preso. Cometió un error, por lo que ahora está asumiendo las consecuencias de sus actos.

Hazlo reflexionar para que comprenda que la maldad no es buena y solo le genera desgracias.

Ilumina su vida y aparta la oscuridad que lo mantiene prisionero de la perversidad y no lo deja razonar. Acompáñalo hoy y siempre para que no vuelva a caer en la tentación.

Alabado Mesías, ten compasión de mi hijo y sálvalo de las garras del demonio. Aleja los malos pensamientos de su mente y purifica su espíritu de todo mal. Amén.

Santísima Virgen María, en esta ocasión te quiero pedir que ilumines a mi hijo para que deje el alcohol y vuelva a ser la persona amorosa y responsable que era antes.

Tú que eres madre, comprendes el dolor y la angustia que me invaden en este momento. Por eso, te ruego que cumplas este humilde favor que vengo a suplicarte.

Aparta las malas ideas de su mente para que logre salir del vicio y haga realidad sus propósitos. Haz que no vuelva a consumir alcohol nunca más.

Amada Señora, apiádate de mi hijo y no lo desampares. Guíalo para que salga del valle de las adicciones y los excesos. Amén.

Señor Todopoderoso, hoy te ruego que ilumines a mi hijo para que encuentre un trabajo digno y justo. Aleja de su vida los malos deseos que le impiden conseguir un buen empleo.

Acompáñalo y no lo desampares, porque solo con tu compañía podrá alcanzar la gracia eterna.

Llénalo de bendiciones y permite que encuentre un empleo decente y estable. No dejes que la miseria lo continúe llevando hacia la pobreza.

En tus manos encomiendo la vida laboral de mi hijo, ya que tú eres el único que lo puede librar de la escasez y llevarlo hacia el éxito. Amén.

Padre misericordioso, perdóname por únicamente buscarte en los tiempos de dificultad, pero sabes que mi hijo se encuentra influenciado por las malas amistades.

Por esa razón, te suplico que apartes a las malas personas que están presentes a su alrededor. Dale la luz necesaria para que comprenda que se debe alejar de ellos.

Ten misericordia de mi hijo y no lo abandones, porque él necesita de ti en este momento. No dejes que caiga en el abismo de los errores y las desgracias.

Dios mío, ilumina a mi hijo para que se aleje de las malas amistades y encuentre el camino hacia la prosperidad y el éxito. Amén.

Querido Señor, te ruego que ilumines a mi hijo para que pueda conciliar el sueño. Aparta de su entorno las malas sensaciones y cualquier presencia extraña.

Haz que pueda dormir tranquilo para que sea un pequeño feliz y alegre. No dejes que la maldad afecte su pureza e inocencia.

No permitas que las pesadillas o los malos pensamientos lo asusten. Purifica su entorno para que se libere de todo mal y peligro que lo esté acechando.

Amado Padre, protege a mi pequeño para que logre conciliar el sueño y las pesadillas no lo vuelvan a atormentar. En tus manos encomiendo su bienestar y serenidad. Amén.

Padre Eterno, me arrodillo ante ti para implorar que tengas piedad de mi hijo y lo cuides de todo mal. Permite que en su vida reinen la paz y el sosiego.

Comprendes que el mal siempre está al acecho y solo pretende causar dolor y sufrimiento. Por eso, te suplico que lo libres de las malas sensaciones.

Haz que tus ángeles celestiales se conviertan en sus fieles protectores para que las desgracias no lo sometan.

Deposito en tus sagradas manos su bienestar y tranquilidad, porque tú eres un ser omnipresente que lo puede proteger de todo mal y peligro que se encuentre a su alrededor. Amén.