Oración A San Cayetano

Padre de la Providencia y Santo Patrono del pan y del trabajo, te suplico que me favorezcas para que pueda conseguir un empleo digno y estable.

Guíame por el sendero de la abundancia y no permitas que caiga en desgracia. Que tu luz me indique el camino correcto hacia la prosperidad económica.

Haz que el trabajo no me haga falta. Que las necesidades no me persigan ni me aflijan. Que la miseria y la pobreza se alejen para siempre.

Querido San Cayetano, en tus manos encomiendo mi bienestar, pues estoy seguro/seguro de que bajo tu gracia alcanzaré la tranquilidad. Amén.

Amado y Bienaventurado San Cayetano, fuente de abundancia y trabajo, hoy vengo a pedirte que me bendigas para que logre conseguir un empleo decente y bien remunerado.

Tú me conoces perfectamente y comprendes que estoy pasando por un momento de ansiedad e incertidumbre.

Por eso, te ruego que me llenes de gracia para que pueda encontrar un nuevo trabajo y no continúe siendo agobiado por la pobreza.

Bendito Patrono del pan y del trabajo, recuerda que yo confío plenamente en tu bondad, porque tú jamás ignoras las peticiones de tus fieles devotos. Amén.

¡Oh! Venerable San Cayetano, Padre de la Providencia y Santo Patrono del trabajo, ayúdame a conservar mi empleo y no permitas que sea víctima del sufrimiento.

Purifica mi entorno laboral de cualquier clase de envidia, soberbia o resentimiento. Haz que únicamente reinen la armonía y los buenos deseos.

¡Oh! Admirable santo de Thiene, lléname de sabiduría y conocimiento para que pueda progresar y no me deje llevar por la pereza ni la avaricia.

En tus sagradas manos deposito mi bienestar, ya que contigo a mi lado podré alcanzar la serenidad. Por los siglos de los siglos. Amén.

Querido San Cayetano de Thiene, Patrono de la salud, del pan y del trabajo, hoy te quiero agradecer por todas las gracias y bendiciones que me has concedido a lo largo de la vida.

Gracias por salvarme durante los tiempos de escasez y darme sabiduría en las épocas de abundancia.

Asimismo, te quiero pedir perdón por no agradecerte como debería y olvidarme de ti luego de alcanzar mis propósitos.

Piadoso San Cayetano, acompáñame y no me desampares ni de noche ni de día, porque tengo la certeza de que bajo tu bendición alcanzaré la bienaventuranza eterna. Amén.

Glorioso San Cayetano, tú que eres justo con los más necesitados, concédeme la gracia de atraer el dinero y la riqueza a mi vida.

Sabes que estoy atravesando por una época de oscuridad y las deudas no me dejan progresar. Por ello, te suplico que me llenes de fortuna y prosperidad.

Haz que todas mis dificultades financieras se solucionen para que encuentre la serenidad y quede libre de cualquier tipo de maldad.

Bendito Santo de la Providencia, atiende mi petición e ilumíname para que pueda conseguir el dinero que tanto necesito y no vuelva a ser atormentado por la miseria. Amén. 

¡Oh! Alabado San Cayetano de Thiene, en esta ocasión me arrodillo a tus pies para suplicar que tengas misericordia de mí y no me abandones.

Comprendes que mi deseo más grande es compartir la vida con una persona que me ame de manera sincera y no tenga malas intenciones.

Por esa razón, te solicito que me concedas la gracia de triunfar en el amor sin que nada ni nadie me cause daño o dolor.

¡Oh! Bondadoso santo de Dios, escúchame y no me desampares, por favor, ya que solamente bajo tu bendición podré alcanzar la fortuna en el amor. Amén.

Padre de la Providencia y Santo Patrono del dinero, hoy recurro a ti en búsqueda de abundancia y fortuna.

Tú que fuiste un presbítero piadoso y generoso con los más pobres, ten misericordia de mí y bendíceme para que mis caminos se abran a la prosperidad.

Sabes que te lo pido de manera humilde y sincera, puesto que mi intención no es acumular riqueza ni tampoco pretendo hacer el mal.

San Cayetano, escúchame y cumple esta noble petición. Haz que el dinero llegue a mi vida y la pobreza no me haga caer en el abismo de la perdición. Amén.

Admirable San Cayetano, tú que eres el protector de los afligidos y la luz de los menos favorecidos, permíteme recuperar todo lo que se me ha perdido.

Sabes que estoy siendo atormentado por la ansiedad y el desespero; por ello, te ruego que me ayudes en este difícil momento.

Guíame con tu luz celestial para que pueda encontrar los objetos que se me han extraviado y, de esa manera, no continúe siendo víctima de la intranquilidad.

Misericordioso santo del Señor, te suplico que me llenes de gracia para que no vuelva a perder ninguna de mis pertenencias. Amén.

Bienaventurado San Cayetano, en esta ocasión te quiero solicitar que me favorezcas para que logre prosperar en cada uno de mis proyectos.

Bendíceme y permite que mi negocio se convierta en un emprendimiento exitoso. Que bajo tu amparo se mantenga libre de cualquier clase de desgracia o dificultad.

Haz que sea visitado por un gran número de clientes para que las ventas aumenten y la escasez jamás lo atormente.

Padre de la Providencia, te doy infinitas gracias por atender mis súplicas, pues tengo la certeza de que no me vas a desamparar. Amén.