Oración A Shangó: Para El Amor, Para Un Favor, Dinero y Más

Alabado y misericordioso Changó, hoy te pido que me ilumines con tu santa luz para que el amor llegue a mi vida. Llévate para siempre cualquier resentimiento que ronde mi entorno.

Te pido humildemente que derrames sobre mí la gracia del amor para que la soledad y la desolación no regresen nunca más.

Querido dios yoruba, te imploro que alejes toda la maldad que me impide encontrar la felicidad. No permitas que la envidia de los infieles destroce mi vida, porque sé que con tu ayuda y protección no habrán penurias ni desgracias.

En ti confío mi vida amorosa, sabiendo que jamás ignoras las súplicas de tus fieles devotos. Amén.

Señor del fuego y la danza, apiádate de mí y concédeme (nombrar el favor). Confío en que tú tienes el poder suficiente para regalarme la gracia que tanto anhelo en este momento.

Te pido que hagas realidad mi deseo, pues sé que tu piedad es infinita, por lo que jamás has ignorado las súplicas de tus fieles devotos.

Mírame con misericordia y no me abandones. Tú eres el único ser que puede cumplir este favor, ya que para ti no existe nada imposible.

Querido padre misericordioso, en tus manos encomiendo esta humilde petición, porque tengo la certeza de que no me vas a ignorar. Amén.

Alabado Changó, dios del fuego y el rayo, rey del gran Imperio Oyo. Vengo ante ti a solicitar que me bendigas para que la suerte llegue a mi vida y el dinero nunca más vuelva a ser un problema.

Tú que todo lo ves y todo lo sabes, comprendes que la desolación y la miseria han llegado a mi vida, pero sé que con tu ayuda todo lo malo se terminará.

Señor guerrero, no permitas que la pobreza y la mala fortuna continúen afectando mi felicidad.

¡Oh! Señor de los truenos y la danza, regálame la riqueza que tanto necesito y te prometo que jamás lo olvidaré. Amén.

Changó, te imploro que domines la mente y el alma de (nombre de la persona), ya que tú sabes que nuestro destino es estar juntos. No podrá encontrar la tranquilidad si no está a mi lado.

Amado rey, apiádate de mí y no me abandones, porque necesito que él/ella me ame y no sea víctima de las tentaciones ni los malos deseos de mis enemigos.

Tú que eres el dios de la justicia, comprendes que todas mis súplicas son sinceras y no pretendo lastimar a mi ser amado.

Regálame la gracia de estar junto al amor verdadero. Yo te prometo que lo/la amaré por encima de todo. Amén.

Señor de la justicia y el fuego, te invoco para pedirte que me protejas de la maldad. No permitas que mis enemigos vumplan su cometido.

Conviértete en mi guardián y sígueme en cada paso que dé para que la justicia siempre prevalezca por encima de la perversidad.

Te imploro que ilumines mi vida, pues me encuentro afligido/afligida por la oscuridad y los malos deseos de los demás.

Changó, en ti deposito mi confianza y bienestar, porque tú eres un dios piadoso y bondadoso, por lo que jamás se ha escuchado que un fiel no haya recibido tu ayuda. Amén.

Rey del fuego y el trueno, cúbreme con tu sagrado escudo para que jamás me afecten los malos designios de mis enemigos. Encárgate de transformar en bendiciones y gracias todas las malas sensaciones que rondan mi entorno.

Impide que las tinieblas se apoderen de mi vida, porque eso es lo que desean mis enemigos, pero sé que tú me ayudarás.

Haz que tu poderoso rayo aleje a todos mis enemigos en este instante. No dejes que regresen de nuevo y me hagan daño.

Bondadoso Changó, no te olvides de mí en este momento, así como yo no lo haré de ti en las épocas de prosperidad y abundancia. Amén.

Querido dios de la justicia y el fuego, que vences a las almas malignas y siempre proteges a tus fieles; hoy te pido de todo corazón que alejes las injusticias y las malas acciones de mi vida.

Haz que cambie la mente perversa y cruel de mis enemigos para que se terminen todos los problemas y dificultades que me persiguen.

Comprendes que las injusticias han llegado a mi entorno para arrebatarme la paz y la tranquilidad, pero sé que contigo a mi lado todo eso se irá.

Señor de los rayos y el trueno, cúbreme con tu manto para que nada ni nadie me someta. Amén.

Changó, hoy vengo a rogarte que me ilumines para que logre encontrar un nuevo trabajo, en el cual pueda alcanzar la felicidad y la prosperidad.

Aleja todos los resentimientos que están a mi alrededor, pues solo me conducen hacia la desgracia y la miseria. Haz que la buena suerte dirija mi destino.

¡Oh! Dios del fuego, no me abandones en este momento. Bendíceme para que siempre haya trabajo en mi vida y nunca se convierta en una necesidad.

¡Oh! Señor de la justicia, muéstrame el camino correcto hacia la fortuna y la tranquilidad. Amén.