Oración a María Auxiliadora: Para Un Milagro, El Hogar y Más

Milagrosa María de los cristianos, vengo a implorarte a tus pies que me llenes de tu gracia. Haz que (decir el milagro) para que mi vida mejore.

El Señor te dio el don de hacer posible lo imposible, por eso ruego que te apiades de mí y hagas realidad lo que anhelo. ¡Oh! Virgen María, regálame tu sagrada bendición.

Querida Señora, madre de Dios y patrona de los cristianos, no me abandones, te lo imploro. Jamás permitas que la maldad termine con mi tranquilidad. Yo confío en ti y todo se hará realidad. Amén.

Venerable María Auxiliadora, ruego que protejas mi hogar de todo mal que lo aceche. No permitas que haya rencor, egoísmo, avaricia, soberbia o tristeza.

Amada Señora, bendice a todas las personas que viven en esta casa para que no sean poseídos por espíritus malignos que deseen nuestra ruina.

Santa María, haz que reine la armonía en mi hogar para que los conflictos y los problemas que nos persiguen no regresen más. Por favor, te suplico que no me desampares.

Impide que Satanás arruine nuestra felicidad, pues nosotros solo le pertenecemos a Dios. Amén.

¡Oh! Santísima María Auxiliadora, te imploro que salves a (nombre de la persona), pues las enfermedades están afectando su salud.

Fortalece su mente y espíritu para que los males no tengan oportunidad de ingresar a su cuerpo en los momentos difíciles.

No lo/la abandones. Concédele el milagro de superar esta etapa de su vida y volver a ser lo que era antes.

Regálale esperanza para que cuando lo/la agobie la desesperación y la tristeza, tenga resiliencia.

¡Oh! Virgen María, madre de Dios, soluciona todos las dificultades y necesidades que lo/la rodean. Amén.

Querida madre María, tú que proteges a todos los niños del mundo y jamás los dejas solos, te pido que me cuides, por favor.

Sé que tú me cuidarás hoy y todos los días porque nunca abandonaste al Divino Niño Jesús cuando más te necesitaba.

No permitas que las personas con malas intenciones se acerquen a mi vida, pues no quiero que dañen la felicidad de estar junto a ti, Jesús y Dios Padre.

También te solicito que cubras con tu sagrado manto a mis padres, amigos y maestros. Aleja las malas personas de sus vidas, santa María. Amén.

Misericordiosa María Auxiliadora, bienaventurada seas, porque Dios te escogió por tu pureza y bondad para ser la madre de Nuestro Redentor.

Santa señora, me arrodillo ante ti para pedirte humildemente que ilumines mi vida, pues deseo encontrar un trabajo digno y en el que me sienta tranquilo/tranquila.

Haz que en mi trabajo solo haya paz y tranquilidad para que la envidia y el odio no arruinen mi progreso.

Virgen María, lléname de riqueza y abundancia, por favor. Aleja la miseria y las desgracias de mi alrededor. Amén.

Sagrada Virgen María, te habla una madre a otra madre, ya que tú comprendes mis preocupaciones y temores respecto al bienestar de mis hijos.

Te suplico que los defiendas de todo peligro que busque hacerles daño, así como lo hacías con Jesús, pues nunca dejaste que le pasara nada malo.

Ilumina su camino para que cumplan todos sus propósitos y no sean seducidos por la debilidad.

Bondadosa María Auxiliadora, en tus manos encomiendo a mis hijos, sabiendo que jamás olvidas las peticiones de las madres. Amén.